Autor:
Wataru Yoshizumi
Título
original: Capuccino
Editorial:
Planeta, 2015
Encuadernación:
Tapa blanda
ISBN: 9788416401185
Páginas:
192
Hoy,
mi autora de manga favorita.
Su
obra más conocida, Marmalade boy, me tuvo tremendamente enganchada tanto al
manga como al anime, allá en mis años mozos. De hecho guardo muy buenos
recuerdos porque fue el primero que compré con lo que iba ahorrando (Dragon
ball nos lo compraban jajaj así que no cuenta).
Por
cierto, lo releeré aprovechando que lo quiero reseñar.
La
verdad es que todo lo que he leído de esta mujer, aunque sean muy culebrones,
me fascina –a falta de leer algunos, ojo-, así que con este ya imaginaréis lo
que voy a opinar.
Tenemos
una pareja, Sôsuke y Ari, que decide vivir juntos sin haberse casado, drama,
pues en Japón está muy mal visto aún en la época en que estamos. El caso es que
sus padres les dan el visto bueno, sobretodo los de la chica, que eran los más
reticentes.
Aunque
por sus trabajos no se ven todo lo que les gustaría, están felices y enamorados
de compartir por fin su propia casa… aunque no como le gustaría a Ari, ya que ella
hace casi todo y no se lo dice a Sôsuke por que no se sienta mal. Discrepo,
pero en fin.
Se nos
tuerce el tema cuando aparece una tercera en discordia, una alumna de Sôsuke
que está ultra-mega-enamorada de él y necesita una cita desesperadamente para
poder centrarse en sus estudios y aprobar los exámenes. ¡¿Perdona?!
Lo
mejor (mentira, es lo peor), es que él acepta por pena… y no le dice nada a su
chica.
En
fin, la bola de nieve. Un dramón.
Sin
embargo me ha ganado del todo –aparte de por ser de quien es- porque no es en
absoluto como me lo esperaba y tiene un toque amargo que me ha gustado
bastante, siendo una historia diferente.
Personajes
muy cuidados, tanto la pareja como los amigos de ambos, otra pareja que también
nos hace estar muy pendiente de ellos, y por último la susodicha, ¿se puede ser
más pesada?
Se
puede.
Y por
supuesto, el maravilloso dibujo de la autora, meticuloso y lleno de detalles, que
ya me cautivó en su día y hace super reconocible la mano de Yoshizumi.
Una
historia que me ha hecho mosquearme mucho –sí, tal cual- y que leí del tirón, y
que, como se imaginará después de leerme, queda más que recomendada.
¿Lo
mejor? Que sólo es un tomo.
12 comentarios:
Me encanta esta autora así que me muero de ganas de leerlo ^^
Un beso y gracias por la reseña.
Había leído cosas positivas de este manga y de Marmalade Boy ni te cuento, así que tengo que leer los dos ya!
Besos!
Ohhh la cubierta me gusta jejeje. Besos
Qué dibujos más monos...pero esa trama con esas cosas que apuntas tan torcidas como que no.
Besos
Cuernos a la vista!! La tragedia está a la vuelta de la esquina, jajaja. Me alegro que te haya gustado.
Un beso ;)
Se nota que te ha gustado, pero ya sabes que con este género no me animo.
Besotes!!!
Ya sabes que no soy de manga.
Uy fui muy fan del anime de marmalade boy, la familia crece jajaja
Besos
Tomo nota. A ver si vuelvo a pasar por la biblioteca a buscar algo de este género...
Besos!
Lo leí el mes pasado y para el poco manga que leo yo, me encantó! pero quiero más jajaja
Un beso!
me lo llevo anotado, y espero encontrarlo porque lo edita Planeta. Esa falta de comunicación se ve que va a ocasionar un dramonón...ayyy...y que bonitos dibujos ehh
un beso,
Ale.
Me ha dado mucha risa tu reseña. Si es verdad que estos mangas tienden a ser culebrones pero uno los disfruta de vez en cuando. Lo deja pendiente para leerlo cuando me provoque algo así.
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