Título: El
gran árbol
Autor:
Susanna Tamaro
Título
original: Il grande albero
Editorial:
Urano, 2010
Encuadernación:
Rústica
ISBN:
9788496886193
Páginas:
128
No había
leído nada de la autora y tenía ganas de estrenarme con ella… si bien su novela
más conocida es “Donde el corazón te lleve”, yo para variar decidí estrenarme
con otra menos habitual en cuanto a recomendaciones de su obra.
Es de esos
casos en los que te llama la atención el libro por lo que sea, en realidad por
nada concreto, me hizo ojitos y ya. Y ha sido uno de esos casos en los que el
resultado ha sido un PLOF en toda regla, y eso que me pasa poco.
En fin, la
historia es que tenemos una fábula, que debo decir me gustó bastante cómo
empezaba, sobretodo pasado el primer capítulo que me pareció un poco petardada
(ojo que el final es… señor, señor…).
Estamos en
un bosque no-se-sabe-dónde, en el momento en que cae una piña loca de
tampoco-sabemos-dónde y acaba naciendo un abeto pequeñito. Y en contra de lo
que medio bosque pensaba, crece en forma de árbol robusto y fuerte.
Somos
partícipes del crecimiento y madurez de ese abeto solitario en medio del claro,
sin otros árboles a los que “dar codazos” para pillar un par de rayos de sol;
van pasando los años con él y finalmente empieza a ser habitado por bichos de
todo tipo, formándose un maravilloso gran lugar poblado entre sus ramas donde
incluso hay lista de espera para anidar.
El árbol
va siendo consciente de que hay otras cosas que suceden a su alrededor, que no
tienen nada que ver con el bosque sino con los humanos que viven a las afueras
de él; se suceden guerras y la Tierra va evolucionando poco a poco hasta llegar
a una era más actual.
Sí es
cierto que es un libro cortito y la letra es relativamente grande, de hecho se
lee en un par de horas sin problema, que está contado en plan fábula –de hecho
nos lo presentan así en la contraportada. Lo siento, yo no lo he visto así en
absoluto, ni siquiera he encontrado una moraleja por ningún sitio… mucho menos
después del momento Papa de Roma… POR FAVOR, no puedo, no he podido con esa
parte del libro, hasta ahí me ha resultado una historia simpática y amena, pero
ahí me han roto la burbuja en la que nos adentramos cuando leemos. De golpe
además.
Tampoco lo
he encontrado ni divertido para los niños ni reflexivo para los adultos, como
también rezan sus solapas. Cuestión de gustos, supongo.
No me ha
calado nada, la segunda mitad del libro me ha chafado totalmente, no puedo
recomendarlo ni como lectura ligera… si acaso a los (muy) fans de la autora.
En cuanto
a escritura, sinceramente, espero que “Donde el corazón te lleve” me guste más…
