Autor:
Wataru Yoshizumi
Título
original: Shueisha
Editorial:
Panini, 2016
Encuadernación:
Rústica
ISBN 1: 9788490947463
ISBN 2: 9788490948095
Páginas:
192
Wataru
Yoshizumi es una de mis autoras de manga favoritas desde hace años, así que
estoy loca de contenta con que vayan reeditando sus obras y trayendo cositas
nuevas.
Tenemos
un shojo ambientado en el típico instituto, con Ayu, la chica mega popular,
suspirando en secreto por Kaji, que evidentemente es EL CHICO. Ambos son muy
amigos y ella no quiere que él note nada.
Por
otro lado, Hiroki, el mejor amigo de Kaji, está enamorado de la muerte de Ayu,
así que habemus triángulo amoroso (ojo, que no es el único). Lo típico.
Nina,
una chica nueva, pierde un mini-ordenador muy importante para ella… que
encuentra Ayu. Cuando se lo devuelve y como agradecimiento, Nina le cuenta que
realmente es una bruja (estudiante de brujería) y que en su ordenador guarda
todos sus conjuros (aparte de ser como el internet de los conjuros, es muy gracioso).
Así,
Ayu tiene una nueva mejor amiga casi a la fuerza, pues Nina decide no separarse
de ella para ayudarle con su magia en todo lo que pueda.
Pero
como no todo es buena intención, la pobre Ayu sufrirá las consecuencias de la
aprendiza, lo que nos deja momentos super divertidos, de verdad, me he reído
una barbaridad con el manga.
Así,
nos metemos de lleno en un shojo repleto de momentos divertidos, confusiones y
confesiones, aunque estas últimas son de chiripa y por meteduras de gamba de la
estudiante de brujería número uno.
Como
viene siendo habitual en la autora, los personajes secundarios cobran
protagonismo, pues tienen mucha fuerza y carisma, tanto los buenazos como los
no tan buenos.
Vemos
cómo los hechizos de amor no son tan eficientes como se esperan, cómo gracias a
un embrujo a una cámara de fotos podemos saber de quién está enamorado el que
posa, conocemos a la peculiar mascota de Nina y a otras tantas con las que se
va relacionando aún sin querer su dueña…
El
dibujo, como siempre, super bonito y reconocible, es una autora con mucha
personalidad y se nota que las historias son suyas, tanto por eso, como por los
toques de humor o determinadas situaciones chorra.
Me
encanta.
Y
lo mejor, son solo cinco tomos.
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