jueves, 14 de octubre de 2021

El amante de la Patagonia

 

Título: El amante de la Patagonia

Autor: Isabelle Autissier

Título original: L’Amant de Patagonie

Editorial: Ediciones B, 2013

Encuadernación: Tapa blanda

ISBN: 9788466653459

Páginas: 256

 


Bueno, me apetecía leer algo sencillo y no demasiado denso… es cuando recurro a lecturas de género romántico, chick-lit… o landscape, como es el caso.

Me animé con este por el sitio donde está desarrollada la mayor parte de la trama, porque la temática de culturas indígenas siempre me ha llamado muchísimo la atención, cómo vivían en y con la naturaleza, sus creencias, sus deidades, etc.

Spoiler: pincha un poco.

En esta ocasión, el viaje es desde Escocia a Argentina, a finales del s. XIX, cuando el nuevo continente se encontraba en plena colonización y los europeos, civilizados, cultos, inteligentes, poderosos, religiosos, ombligos, estaban ahí para volver a los salvajes lo menos salvajes posible. Y por supuesto, evangelizarlos, convertirlos al cristianismo, que sin Dios no somos nadie.

No, no soy religiosa, pero confío en que nadie se tome mal la ironía.

Nuestra protagonista, una muy joven y huérfana Emily, se siente fascinada por ese nuevo lugar, pues en cierto modo le recuerda a su tierra natal. También está ansiosa por conocer la cultura de los indígenas… mezclándose así distintos hilos, uno de ellos contado por una mujer indígena, una especie de chamana, una yekamush; en el otro, por supuesto, tenemos a Emily.

La verdad es que al estar catalogado como literatura romántica, me esperaba más romanticismo… esto no es negativo, en absoluto, pero me ha sorprendido que la historia de amor como tal ocupe menos de un tercio del libro.

El caso es que, aparte de esto y de ser ligeramente predecible, me hubiera gustado que hablara quizá un poco más de esas antiguas civilizaciones, ya que, aunque nos cuentan costumbres, me da la sensación de que se queda todo contado muy superficialmente; sí se capta esa “crítica” al proceso de la colonización, pues la vivimos y sufrimos desde los dos extremos completamente diferentes… pero se me ha quedado muy flojo.

Sí es una lectura entretenida y resulta bastante fluida, pero he echado en falta más desarrollo en general a lo que es la historia en sí; los personajes están bien elaborados –sin tirar cohetes, pero lo dicho-, la ambientación está conseguida, se exponen muy bien ambas civilizaciones y sus distintos pensamientos… pero lo dicho, me ha faltado “algo” que no es precisamente referente a la historia de amor.

De igual modo, ha sido ameno leerlo, que al fin y al cabo era lo que buscaba.

7 comentarios:

Noelia Cano dijo...

No sé si sería de mi elección por todo lo que cuentas. Y por cierto, a mi esa ironía me ha gustado mucho. No se puede ir por el mundo con esa superioridad moral por ser de una u otra religión.
Besos.

Margari dijo...

No es un género que frecuente mucho y viendo que no te ha entusiasmado, lo dejo pasar.
Besotes!!!

Erick Adams Foster dijo...

¡Hola!

Me parece que he llegado a ver esta portada en algún lado, pero no lo recuerdo del todo. La verdad es que no es mi tipo de libro y, después de leer tu reseña, es un libro que definitivamente dejaré pasar, jaja.

Pd: no conocía tu blog, pero sin dudas ya tienes nuevo seguidor.

¡Nos leemos!

Marisa G. dijo...

Por la cubierta y la temática se parece mucho a los Sarah Lark. A mí este género no me disgusta y casi agradezco que el romanticismo esté sujeto por las riendas. Si te entretuvo pues buena lectura ha sido. Besos

Norah Bennett dijo...

Demasiado flojito para que yo me anime. Cuando despuntó este género me leí unos cuantos seguidos y luego pinché yo también porque empezaron a parecerme todos iguales. Para volver necesito uno que prometa más.
Besos

buhoevanescente dijo...

Me gustó conocerlo por tu blog.
Gracias por la reseña.saludosbuhos 😊🍂🍁🍂🍁

Narayani dijo...

Hace mucho tiempo, cuando se pusieron de moda, leí alguna novela landscape y no me convencieron mucho, así que di mi relación con ellas por finiquitadas. Me pasaba como a ti con esta, que flojeaba en algún punto, se quedaba coja.

Me alegro que te sirviera para distraerte y entretenerte. :)

Besos!